Siempre que te caigas, recoge algo

Vaamos a ver, hoy no ha sido uno de los mejores días de mi vida, indudablemente. Han salido las notas de la oposición y finalmente suspendí. No es algo que me sorprenda, ya que realmente me lo esperaba, pero si es algo que sorpresivamente me ha molestado.



Y no es por el hecho de suspender en sí, sino por mi falta de ambición, en este caso me he dado cuenta de lo siguiente: las capacidades, se que las tengo, la decisión, se que no.



Se que no es un problema para mi en la actualidad el hecho de no aprobar esta opsosición, y que realmente no estaba muy seguro de querer aprobarla, pero sí que es cierto que los sentimientos que han recorrido mi mente han sido de rabia y frustración, más que por esto en particular, por el rumbo a seguir en general.



Y bien, llegó el momento en el cual todo cambia, siendo seguro que los objetivos finales quedan en mente, sí que cambia la forma de conseguirlos, para ello la primera receta va a ser la de ir soltando lastre, es decir, todos los compromisos que hasta hoy tengo adquiridos voy a mantenerlos, y voy a cumplirlos en el menor tiempo posible, pero en el futuro trataré de que el compromiso principal sea conmigo mismo.



Hablo del futuro, es decir, el futuro inmediato, se que va a ser bastante complicado para mi el hecho de cambiar de estilo de vida, pero si realmente quiero finalmente conservar el que tengo con todo lo que ello conlleva, debo hacer este sacrificio.



Lo que recojo con esta caida, pues creo que me queda claro, el no confiar en una forma excesiva en mis posibilidades de conseguir las cosas con el mínimo esfuerzo, el adquirir una nueva estrategia para la consecución de mis objetivos, y lo que más me va a doler, tratar de ser un poco más egoista y menos altruista.



Como se suele decir, bonitas sine disciplina, mater delictorum est. ¡Ojalá y pueda conseguirlo!

Campañas electorales

En estas fechas en las que estamos inmersos en un proceso tan transcendente como son unas elecciones para renovar el Congreso y el Senado, nos encontramos ante diferentes actitudes que nos dicen mucho acerca de nosotros.

Unos son los apasionados, los que creen en lo que defiendeny que se arman de razones para que su opinión sea la más válida, una cosa está clara, y habrá también personas que les ocurra lo contrario, lo claro es que ellos lo defienden creyendo en lo que están defendiendo.

Otros son los pasotas, a los cuales les da lo mismo ocho que ochenta, a los cuales la misma vida les ha puesto en una situación en la cual la anestesia es de tal calibre que no consiguen aunque lo deseen, inquietarse lo más mínimo a no ser que vean amenazados sus bienes básicos, aunque lo básico no sea lo más básico en realidad.

Finalmente tenemos a los que analizan y no defienden ninguna postura, tan sólo apoyan en un momento determinado aquello a lo que están sometiendo a un continuo juicio de valor, estos son los que más miedo les deberían dar a los que tengan que acatar el veredicto de las urnas, ya que a pesar de no ser una mayoría son los que ante un momento de empate técnico como el actual son capaces de decantar el proceso de uno u otro lado.

Y esto es así, y no sólo en las elecciones generales, sino que también en todo tipo de elecciones. Yo desgraciada o afortunadamente creo encontrarme entre los primeros, pero no os quepa ninguna duda que en el caso de que en alguna ocasión tuviese que someterme al apoyo de otras personas que tuvieran que apoyarme por mis actos pasados, presentes y futuros, me gustaría tener una fuerte base de los primeros y convencer a los terceros para finalmente poder despertar de su letargo a los segundos.

Afortunadamente me da la sensación de que en los procesos electorales en los que yo personalmente me hallo inmerso por su cercanía, hay pocos de los segundos, por lo que la incertidumbre jugará una gran baza hasta el momento final.

Desisto del feevy

Al menos de momento, estoy intentándolo por todos los medios y no lo consigo. A ver si hay otro momento de lucidez en el cual pueda incorporarlo al blog

Gripazo

Aprovechando que estoy totalmente inactivo, en cama con mi portatil voy a actualizar el blog que creo que ya es hora.

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Llevo un día en cama, pegandome un maratón de Carl Sagan brutal y pensando en las cosas que me interesan y me intrigan.

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Como informático a medias, la base matemática que arrastro me da para pensar en como está todo conectado, y como el lenguaje de las matemáticas que tenemos establecido en algunas ocasiones nos resulta limitado para poder explicar el Universo.

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Vamos a ver que aclare esto, en algunos casos los instrumentos que tenemos para darle forma a la física son insuficientes y así nos encontramos con el problema de la evolución de las matemáticas no esta siendo todo lo revolucionaria que debería. Las matemáticas no son una rama de la fisica, no se validan por experimentación, sino por demostración, además las matemáticas no representan la realidad, sino modelos que se adaptan de una forma más o menos acertada a la misma.

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Es por esto que en principio, y siempre desde mi limitado punto de vista, que no se produce una revolución matemática que nos de otra comprensión del mundo, a pesar de ser al contrario, las matemáticas surgen de la necesidad de explicar algo, no de la curiosidad de aumentar la potencia de las mismas.

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En la actualidad tenemos retos por delante como son la unificación, la gravedad cuantica, los agujeros negros, etc., todos ellos de dificil comprensión con la matemática actual.

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Creo que estoy desbarrando un poco con mis 39 de fiebre.

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Y por cierto, que de mi oposición aún no se sabe nada de nada